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Celebración de las mujeres en la tecnología con la CEO de Panzura, Jill Stelfox
Conozca a Jill Stelfox. Jill es una emprendedora y fundadora en serie, posee varias patentes y es la chief executive officer (CEO) y executive chair de Panzura. CloudFS, el galardonado sistema de archivos global de Panzura, permite acceder a los archivos desde cualquier lugar con visibilidad, seguridad y control.
Además de llevar a Panzura otro nivel de éxito, Jill celebra y eleva activamente a las mujeres en el mundo de la tecnología. Es cofundadora de Women in Sports Tech y es miembro actual de su junta directiva.
“Algo que he notado es que las mujeres quieren verlo para serlo”, dice Jill. “Quieren saber que es posible. Contar historias sobre otras mujeres en el mundo de la tecnología puede mostrarles que es totalmente posible. Escuche, si una abuela de dos nietos puede ser CEO, usted también puede”.
¿Podría presentarse, como persona y como profesional?
Soy Jill Stelfox. Soy madre de dos hijos y abuela de dos: uno de un año y otro de tres. Llevo 33 años felizmente casada con una excelente vida familiar. También soy la CEO de Panzura.
¿Por qué es importante para usted el Mes de la Historia de la Mujer?
El Mes de la Historia de la Mujer es importante para mí porque, si bien las mujeres han avanzado mucho en términos de igualdad, sobre todo en el lugar de trabajo, aún queda mucho camino por recorrer.
Como mujer en el mundo de la tecnología, he recaudado un par de cientos de millones de dólares en capital riesgo y capital privado, y he devuelto miles de millones a los inversionistas. Sin embargo, por lo general soy la única mujer CEO de un sector y, desde luego, en una sala.
Panzura se volvió a fundar bajo su liderazgo, lo que se tradujo en numerosos resultados satisfactorios tanto en el ámbito técnico como en el cultural. ¿Cuáles son los desafíos y las oportunidades de la “refundación” para las startups?
Volver a fundar una startup es un desafío, porque la premisa es que se toma lo principal de lo bueno que tiene y se cambia. Volvimos a fundar la empresa hace tres años y desde entonces crecimos un 485 %. Panzura triplicó la cantidad de productos que tiene en el mercado y agregamos cientos de clientes.
Ayudar al equipo que estuvo aquí a comprender que la transformación llevará a la grandeza requiere mucha supervisión y cuidado desde el principio. Al ver realmente las posibilidades que ofrece la tecnología de nube híbrida y lo que esta puede hacer para comprender lo que sucede con los datos para los clientes, han ocurrido todo tipo de cosas maravillosas.
Ha sido un trabajo duro y muy divertido.
¿Puede hablarnos de una historia de éxito de Panzura en la que su experiencia como CEO y estratega veterana fue fundamental?
Nunca olvidaré el primer día que asumimos el control de Panzura. Fue el 7 de mayo de 2020 y esos fueron los primeros días de COVID. Imagínese hacer una llamada por Internet durante ese tiempo y anunciar: “La empresa se compró y soy su nueva CEO”. Las personas estaban llenas de miedo e incertidumbre ante todo. Algunas personas se llenaron de lágrimas al respecto.
Al instante eso me cambió para siempre.
Es un momento maravilloso para que las mujeres dirijan empresas, porque normalmente podemos ver cuándo las personas lo pasan mal. Los hombres también pueden verlo, pero tenemos más libertad como mujeres para poder hacer algo al respecto. Así que fue fácil para mí ser empática y ser “la persona comprensiva”. Yo soy así.
Tenía todas esas notas sofisticadas sobre lo que iba a hablar y cómo iba a cambiar la tecnología… cómo íbamos a hacer todas estas cosas geniales y buscar clientes y mercados nuevos. Para ser honesta, nada de eso importó ese día. Ese día, lo que importó fue ser humano: hablar de lo aterrador que era eso y lo que significaría “estar bien” en cuanto a la empresa.
Cuando colgué la llamada, todos parecían más felices. Estaban en un lugar tranquilo. Colgué esa llamada y pensé: “Debo hacer esto muy bien por estas personas. Merecen comodidad y merecen amabilidad”. Mi misión no se centró en la tecnología, sino en el equipo.
¿Cómo apoyó AWS sus objetivos para Panzura?
Nuestra relación con AWS comenzó cuando algunas personas, que eran mujeres, se pusieron en contacto conmigo para hablar sobre lo que una asociación con AWS podía significar para la empresa.
Habíamos recaudado dinero nuevo y los inversionistas nuevos que incorporamos también eran mujeres.
La noche en que firmamos el acuerdo con AWS, que para nosotros supuso un cambio en la empresa, lo celebramos con una cena. En esa cena, nos dimos cuenta de que toda la transacción la hicieron mujeres. No fue porque intentáramos hacer algo basado en el género, sino porque todos estábamos en una posición en la que podíamos influir en el cambio de esta manera.
Nunca olvidaré en toda mi carrera que la primera vez que hice una transacción multimillonaria, todo fue con mujeres y fue con AWS, y es extraordinario.
Para responder a la pregunta sobre cómo apoya AWS nuestros objetivos, cuando volvimos a fundar Panzura, pasamos de vender a empresas medianas a vender a empresas de gran escala. Entre ellas se encuentran algunas de las mayores instituciones financieras, instituciones del sector sanitario y empresas de fabricación del mundo. Trabajamos con ellas para llevar sus cargas de trabajo de datos que se encuentran en servidores en las instalaciones a la nube de una manera realmente eficaz.
Al hacerlo, podemos ponernos en contacto con nuestro equipo de AWS y obtener acceso instantáneo al miembro del equipo de AWS de esa cuenta de cliente específica. Es increíble. Es una llamada telefónica y tenemos a las personas indicadas en la reunión indicada con la actitud indicada.
Estamos muy alineados con la filosofía de AWS respecto de la misión de llevar estas cargas de trabajo importantes a la nube y ayudar realmente a estas empresas a ser más eficaces en lo que hacen para que tengan éxito.
La segunda parte sobre el trabajo con AWS es que nuestra tecnología se ejecuta mediante AWS. Como socios de AWS, contamos con un conjunto de tecnologías disponibles en AWS Marketplace.
Por lo tanto, la relación con AWS se basa en dos partes: la tecnología y la comercialización. En cuanto a la tecnología, hemos conocido a algunos de los pensadores más brillantes. Están muy comprometidos con nuestro éxito. Uno entra en unas salas donde se habla sobre resolver un problema tecnológico. Son una persona de AWS y personas de Panzura, y el intercambio es muy libre, abierto, productivo y útil. En ese sentido, es una excelente relación.
¿Puedes dar algunos consejos para las mujeres fundadoras?
Sí. Siempre he tenido un asesor. Cuando se practican deportes, es muy normal tener un entrenador. En los negocios, también es necesario uno. Siempre tiene que haber alguien que esté de su lado para que le dé ánimos.
Estos no son recursos costosos y se pueden encontrar en cualquier nivel. Solo es cuestión comunicación. A veces, como mujeres, no pedimos ese tipo de ayuda, pero está ahí para que nos la den.
¿Cómo imagina el futuro de las mujeres en la tecnología?
El futuro de las mujeres en la tecnología, en mi opinión, es que representemos al menos el 50 % de quienes trabajan en este sector.
Sin duda, podemos hacerlo y podemos hacerlo junto con la administración de todo lo demás en nuestras vidas: nuestras familias y nuestros hogares, nuestras mascotas y nuestros cónyuges. Podemos hacerlo todo y aun así podemos ser iguales en la mesa de negociaciones.
Tuvimos muchos avances. Cuando comencé en la tecnología hace 25 años, no había ninguna mujer por aquí. Ahora veo mujeres en todos los niveles. No las veo muy a menudo en la alta dirección. Pero sin lugar a dudas, si nos fijamos en nuestra junta directiva, está formada en un 50 % por mujeres y nuestra empresa, en un 30 %.
Hemos recorrido un camino muy, pero muy largo. Y creo que nos queda más por hacer, pero hemos avanzado mucho. Tenemos que apoyarnos unas a otras como mujeres, tenemos que contratarnos unas a otras. Tenemos que impulsarnos unas a otras, tenemos que promocionarnos unas a otras. Tenemos que hacer todo eso.
¿Cuál es el futuro para usted, para Panzura y para Panzura con AWS?
En lo personal, espero tener pronto un tercer nieto.
Desde el punto de vista laboral, no podría sentirme más honrada de ser la CEO de Panzura. Quiero seguir siendo la mejor persona que pueda ser para este maravilloso equipo que creamos.
Estamos decididos a cambiar, junto con AWS, un sector que no ha cambiado en 20 años. Existe una forma más eficaz y segura de almacenar, localizar y administrar los datos. Queremos formar parte de esa revolución, junto con AWS. Como empresa, asumimos el compromiso estratégico de apostar completamente por AWS. Estamos muy entusiasmados con las posibilidades de cambiar realmente el mundo.
Megan Crowley
Megan Crowley es redactora técnica senior del equipo de contenido para startus de AWS. Con una carrera anterior como profesora de inglés en un instituto, la impulsa un entusiasmo incesante por contribuir a un contenido que sea a la vez educativo e inspirador. Compartir las historias de las startups con el mundo es la parte más gratificante de su puesto en AWS. En su tiempo libre, Megan trabaja en la carpintería, en el jardín y en los mercados de antigüedades.
Jill Stelfox
Jill Stelfox es presidenta y directora ejecutiva de Panzura, una empresa de software que transforma el almacenamiento en la nube en un sistema de gestión de datos de alto rendimiento. Stelfox aporta a su cargo más de dos décadas de liderazgo corporativo, tras haber ocupado puestos clave en destacadas firmas tecnológicas, como Zebra Technologies, Graffiti Sports, Defywire y Noblestar. Antes de ser nombrada directora ejecutiva de Panzura en 2020, Stelfox fundó la empresa de catalizadores del mercado intermedio EDGY, donde ayudó a empresas como McAfee, Adobe y USAA a transformar, alinear y poner en marcha los procesos empresariales y tecnológicos. A lo largo de su carrera, Stelfox ha creado y dirigido empresas de software empresarial, impulsando el valor para las partes interesadas a través de exitosas actividades de financiación de riesgo, colocación de capital privado y fusiones y adquisiciones, que han devuelto más de mil millones de dólares a empleados e inversores.
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